Son múltiples las causas de enfermedades emergentes: ponente

Es importante tomar en cuenta acciones en contra de las enfermedades, como estar preparado para responder a la emergencia, entre otras

Al ser humano lo rodean mil 400 organismos que pueden crecer, incluyendo 217 virus, 538 bacterias, 307 hongos, 66 protozoarios y 287 gusanos  intestinales “de los cuales el 61% pueden ser trasmitidos entre los humanos y los animales, y más del 10% son considerados como emergentes, que nunca antes nos habíamos encontrado”, señaló el Dr. Miguel Ángel Bedolla, quien impartió la conferencia magistral Enfermedades emergentes, en el marco de las actividades del XIV Encuentro de Especialistas de la Región Norte de Jalisco y Sur de Zacatecas. 

La Organización de las Naciones Unidad en 2007 advirtió que las enfermedades infecciosas están emergiendo con una rapidez nunca antes vista, puesto que “desde 1970 cerca de 40 de estas especies que provocan enfermedades emergentes han sido descubierta, incluyendo el ébola, chikungunya, influencia aviar,influencia porcina y zica”, recalcó el ponente. 

Asimismo señaló que entre las causas de las apariciones de estas especies se encuentra “que siempre haya estado entre nosotros pero que no nos hayamos dado cuenta, agentes que ya conocíamos pero que no sabíamos que se tenía una relación con una enfermedad, pobreza y guerras”.  

También destacó que los procesos causales son múltiples, puesto que hay procesos naturales como la evolución de los patógenos y actores humanos que tienen que ver con la interacción en el ambiente, “Para que un agente infeccioso emergente se establezca se necesita que el agente sea introducido a una población vulnerable y que la puede empezar una sola persona pasándola a otra causando la enfermedad y así sucesivamente”.

Asimismo señaló que es importante tomar en cuenta cuatro acciones en contra de las enfermedades, como mitigar, estar preparado para responder a la emergencia, mantener la seguridad de la población y recuperar para que todo vuelva a ser igual.  

 

Texto y fotografías: Melisa Ledesma